Asimismo, la RFEF condena enérgicamente este tipo de sucesos, que nada tienen que ver con el fútbol y muestra su rechazo más contundente a la violencia.
La RFEF seguirá trabajando con todas sus fuerzas y con todos sus medios, como viene haciendo ya, con el fin de evitar que este tipo de lamentables acontecimientos se vuelvan a repetir.