- El crecimiento intertrimestral se sitúa en el 0,8%, casi el triple que la media de la zona euro
- El empleo crece a un ritmo anual del 3,1%, una décima más que el trimestre anterior
- La inversión aumenta el 6,5% y el consumo de los hogares, el 3,5%, en ambos casos de forma acelerada
La economía española registró en el tercer trimestre del año un avance del 0,8% respecto del segundo, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística. Este crecimiento casi triplica la media de los países del euro para ese periodo. En los últimos doce meses, el crecimiento se ha elevado al 3,4%, dos décimas más que el trimestre anterior. Esta tasa es la más alta desde el cuarto trimestre de 2007, es decir, un año antes de que comenzara la recesión de la economía española. El empleo crece a un ritmo anual del 3,1%, una décima más que en el segundo trimestre, y se crean 511.600 puestos de trabajo con un aumento de la remuneración por asalariado del 0,3% en un contexto de caída de precios.
Los datos de la Contabilidad Nacional correspondientes al tercer trimestre del año muestran que la economía española mantiene un fuerte ritmo de crecimiento y que este supera al de los principales socios europeos. Frente al 0,3% de media del conjunto de la zona euro, el mismo porcentaje para Alemania y Francia y una décima menos en el caso de Italia, la economía española registra un crecimiento intertrimestral del 0,8%. Se encadenan así más de dos años de crecimiento positivo, después de haber acumulado tasas negativas o muy cercanas a cero desde finales de 2008, cuando se desencadenó la recesión más larga y profunda de la historia reciente en España.
El crecimiento interanual ha sido del 3,4%, la tasa más alta desde el cuarto trimestre de 2007; es decir, un año antes de comenzar la recesión. Supone una aceleración de dos décimas con respecto al segundo trimestre. La principal aportación al crecimiento proviene de la demanda nacional (3,9 puntos), mientras que el sector exterior detrae medio punto. Dentro de la demanda nacional es el consumo privado el que más tira de la economía (2 puntos), seguido de la inversión (1,3 puntos).
En cuanto a la demanda nacional y respecto de los últimos doce meses destaca el crecimiento de la formación bruta de capital fijo (6,5%), en especial, los bienes de equipo (10,6%) y, en menor medida, la construcción (5,5%). La inversión en construcción encadena así seis trimestres seguidos en positivo. El consumo de los hogares, por su parte, aumenta el 3,5% en el último año, el ritmo más alto desde que en el primer trimestre de 2014 empezó a registrar tasas positivas y también el más elevado desde el cuarto trimestre de 2016. En cuanto al sector exterior, las exportaciones mantienen un fuerte vitalidad, con un crecimiento del 5,6% respecto de hace un año, frente al aumento del 7,7% en las importaciones.
La evolución del empleo medida en puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo da una creación neta de 511.600 empleos. Este dato supone un aumento del 3,1% respecto de hace un año, una décima más que el trimestre anterior y el sexto trimestre seguido en positivo. La tasa anual es también la más alta desde el tercer trimestre de 2007. La remuneración por asalariado aumenta el 0,3% en tasa interanual, una décima menos que en el segundo trimestre, en un contexto de inflación negativa, lo que permite ganancias de poder adquisitivo.